LOS CONFUNDEN CON ROBA CHICOS Y CASI LOS LINCHAN.
La gente empezó a rodearlos para interrogarlos, pero en cuestión de minutos la situación se salió de control, pues empezaron a acusarlos de dedicarse al robo de infantes y de traficar sus órganos. Incluso les arrojaron gasolina y amenazaron con prenderles fuego.
Elementos de la Policía Municipal llegaron al lugar, pero la turba se negó a entregarlos, siendo finalmente, personal de la Secretaría de Marina y Guardia Nacional, quien los convenció de seguir el procedimiento conforme marca la ley.
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