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CLAUDIA ARLETTE ESPINO, CANDIDATA A LA SECRETARÍA EJECUTIVA DEL INE, BLANCO DE VIOLENCIA EN CHIHUAHUA

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*** La trayectoria de Espino destaca además de su experiencia electoral, también por su identidad indígena como mujer rarámuri.

*** Desde su salida del Instituto Electoral del Estado, Espino ha sufrido acusaciones sin sustento e, incluso, amenazas e infundios.

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Por. Carlos Bonaparte

Ciudad de México. – El pasado viernes, las redes sociales y algunos medios de comunicación iniciaron el debate tras la renuncia de la encargada de despacho de la Secretaría Ejecutiva del Instituto Nacional Electoral (INE), Claudia Suárez, considerado el segundo puesto administrativo más importante dentro del organismo. Poco después, comenzó a circular el nombre de Claudia Arlette Espino, exconsejera presidenta del Instituto Estatal Electoral de Chihuahua, como posible sucesora.

Claudia Arlette Espino, reconocida especialista en el campo del medio electoral y de los derechos humanos, manteniendo una sólida trayectoria en el ámbito del desarrollo ciudadano y social.

Espino, reconocida especialista en el campo del medio electoral y de los derechos humanos, manteniendo una sólida trayectoria en el ámbito del desarrollo ciudadano y social, así como en lo relativo a la democracia incluyente,  es ampliamente conocida por su lucha a favor de las acciones afirmativas. Sin embargo, su postulación ha revivido antiguas rencillas y discrepancias con personajes en Chihuahua, estado donde lideró exitosamente el órgano electoral local, pero en el que persisten dos grupos políticos históricamente enfrentados.

La trayectoria de Espino incluye un doctorado con tesis doctoral sobre las defensorías públicas en materia de derechos humanos; la presidencia del Observatorio de Participación Política de las Mujeres en Chihuahua y la fundación de la Red Nacional de Consejeras y Consejeros Electorales por una Democracia Incluyente (RENACEDI), para proteger los derechos político-electorales de los pueblos indígenas, así como cargos en el ámbito académico, siendo profesora e investigadora de la Universidad Autónoma de Chihuahua y profesora invitada a instituciones nacionales e internacionales de estudios superiores sobre los temas que conoce y procura en su natal Chihuahua.

Desde su salida del Instituto Electoral del Estado, Espino ha sufrido acusaciones sin sustento e, incluso, amenazas e infundios, a manera de lo que algunos califican como un boicot sistemático. Fuentes cercanas señalan que la llegada de Yanko Durán Prieto a la presidencia del Instituto hace más de tres años, periodo en el que sistemáticamente ha procurado y fracasado en desacreditar los evidentes logros de la gestión electoral y social de Espino, generando tensiones que se extienden hasta el presente.

Entre las acusaciones fabricadas en su contra, se incluyen supuestas irregularidades administrativas sin fundamento y sin procedencia. Sin embargo, colaboradores de la exconsejera y personal del propio órgano sostienen que estas denuncias son parte de una campaña de desprestigio encabezada por José Miguel Salcido Romero, expresidente del Tribunal Superior de Justicia, quien también ocupó cargos durante el gobierno de César Duarte y enfrentó cargos por peculado, abuso de autoridad y uso ilegal de atribuciones y quien actualmente es aliado de Yanko Durán.