LOS CAMBIOS EN LOS PODERES EJECUTIVO, LEGISLATIVO Y JUDICIAL, FUERZAN AL PESO A DEVALUARSE EN SOLO 70 DÍAS
*** En los primeros dos meses de gobierno de Claudia Sheinbaum, el peso en franca devaluación.
*** Elementos de gobernanza, han provocado especulación en los mercados cambiarios.
Ciudad de México. – En el breve espacio de dos meses, coincidente con el avance del nuevo gobierno de México encabezado por Claudia Sheinbaum, las cosas en el contexto económico y productivo –en particular del renglón alimentario— se empiezan a complicar, frente a la falta de inversiones gubernamentales y privadas, la tardanza en el acomodamiento del Gabinete, lentitud en el esquema de ingresos federales y retraso en el ejercicio del presupuesto federal.
Estos elementos de gobernanza, han provocado especulación en los mercados cambiarios, con el resultado de una ligera pero preocupante, devaluación del peso frente al dólar. Hace apenas cuatro meses, la cotización del dólar fluctuaba en un rango de 17 pesos por dólar, mientras que, en la actualidad, es del orden de 21 pesos por dólar.
Hay razones que indican que “un nuevo gobierno sin complicaciones, debe asumir su responsabilidad lo más rápido posible. Sin embargo, lo ocurrido en México en los últimos meses en los procesos de elección y cambio de gobierno, se ha dado mayor importancia a la política sobre la dinámica económica.
Esto demuestra que los factores de producción – consumo de bienes y servicios, exigen una dinámica capaz de mantener la oferta y la demanda en los mercados, a fin de contener el factor de paridad entre el peso y el dólar.
En sólo sesenta días transcurridos del gobierno de la presidenta Sheinbaum, lo que ha ocurrido en la economía mexicana, sobre todo en lo relacionado con la paridad del peso respecto del dólar, indica la presencia de una devaluación entre 18 y 20 por ciento. Esto presume que, para finales de 2024 y principios de 2025, tendríamos en el mercado de cambios un valor aproximado de 22 pesos por cada dólar.
Hubo acontecimientos que se conjuntaron para una devaluación progresiva, después de las elecciones federales, como fueron las reformas a nuestra Constitución que López Obrador consideró necesario emprender –las anunció el 5 de febrero de 2024—para su ejecución inmediatamente de que él dejara la Presidencia de México, el uno de octubre del año corriente.
Es decir, dejó esa obligación en manos de su sucesora, que finalmente recayó en la ahora presidenta Claudia Sheinbaum, y el nuevo Congreso de la Unión. En ambas cámaras, de Diputados y de Senadores, obtuvo el triunfo el partido en el poder, junto con sus aliados. En esta etapa, se mantuvo el equilibrio en la paridad peso-dólar